FAMILIA
Divorcio
¿Qué es un divorcio?
El divorcio es un proceso legal que disuelve y pone fin de manera definitiva al matrimonio válido, cancelando todos los deberes y responsabilidades que derivan del mismo. Esta disolución legal implica la separación formal de los cónyuges, permitiéndoles volver a contraer matrimonio o iniciar una nueva unión registrada con otra persona si así lo desean. El divorcio suele involucrar procedimientos legales, como trámites judiciales o extrajudiciales, dependiendo de las leyes del país o jurisdicción específica.
¿Qué documentación necesito para acudir al notario a formalizar un divorcio ante notario?
Documento nacional de identidad
Acompañados como mínimo por un abogado profesional en ejercicio
Certificado literal del matrimonio expedido por el registro civil
El convenio regulador del divorcio
El libro de familia
El certificado de empadronamiento de los cónyuges
¿Cuánto cuesta divorciarse ante notario?
Si desea más información contacte con nosotros para poder asesorarle y realizar un presupuesto. El mismo está calculado en base a dos criterios: 1) nuestro conocimiento sobre el Arancel Notarial (Real Decreto 1426/1989, de 17 noviembre) y 2) nuestra experiencia diaria en la preparación de este tipo de documento notarial. No obstante, cualquier variación (al alza o a la baja) será debidamente justificada en el momento de emitir la factura definitiva que genere el servicio notarial prestado.
Preguntas frecuentes
Tradicionalmente, el matrimonio ha sido considerado como una unión duradera y permanente entre dos personas. No obstante, en la actualidad, las concepciones sobre el matrimonio han evolucionado y varían según las culturas, las creencias religiosas y las leyes de cada país. Si bien muchos matrimonios aspiran a ser duraderos, en algunas situaciones, las parejas pueden decidir disolver su unión legalmente a través del divorcio o la anulación, lo que refleja que el matrimonio no siempre se percibe como una unión perpetua.
Las vías para formalizar una ruptura de la relación entre cónyuges incluyen principalmente el divorcio y la separación legal.
– **Divorcio**: Implica la disolución legal de un matrimonio y establece que los cónyuges recuperan su estatus civil de personas solteras, permitiéndoles casarse nuevamente si así lo desean.
– **Separación legal**: Es una alternativa al divorcio en la que los cónyuges permanecen casados legalmente pero viven separados. Esto puede implicar acuerdos sobre la división de bienes, la custodia de los hijos y el apoyo económico.
Además, en algunas jurisdicciones, puede haber otros métodos para formalizar la disolución de una relación matrimonial, como la anulación (que declara nulo el matrimonio, considerándolo inválido desde su origen), dependiendo de las circunstancias específicas del caso y las leyes locales.
La separación y el divorcio son dos formas de disolver un matrimonio, pero difieren en algunos aspectos:
– **Separación**: En la separación, los cónyuges permanecen legalmente casados, pero viven vidas separadas. A menudo, este proceso involucra la división de bienes y establece acuerdos sobre la custodia de los hijos, la manutención y otros aspectos legales. Sin embargo, no pone fin al matrimonio; los cónyuges siguen siendo legalmente casados y no pueden volver a casarse mientras persista esta unión.
– **Divorcio**: El divorcio, por otro lado, disuelve legalmente el matrimonio. Una vez se completa el proceso de divorcio, los cónyuges recuperan su estado civil de personas solteras y tienen la libertad de volver a casarse si así lo desean.
En resumen, la separación legal mantiene el vínculo matrimonial aunque los cónyuges vivan separados, mientras que el divorcio rompe legalmente el matrimonio y permite a los cónyuges seguir adelante con sus vidas de manera independiente.
La separación de hecho es un término que se refiere a la situación en la que los cónyuges deciden vivir separados sin seguir los procedimientos legales formales para obtener una separación judicial o notarial. En este caso, la pareja vive aparte, pero legalmente siguen estando casados.
Por otro lado, la separación judicial o notarial implica un proceso formal, reconocido por la ley, que puede ser realizado a través de los tribunales (separación judicial) o mediante escritura pública ante notario (separación notarial). Ambos métodos tienen efectos legales que incluyen acuerdos sobre la custodia de los hijos, la pensión alimenticia, la división de bienes y otras cuestiones.
La principal diferencia radica en que la separación de hecho no cuenta con el respaldo legal ni con la regulación de derechos y obligaciones que sí ofrece una separación judicial o notarial, la cual establece condiciones específicas que deben ser cumplidas por ambas partes.
El divorcio es el proceso legal que disuelve el vínculo matrimonial entre dos personas casadas, poniendo fin de manera oficial al matrimonio. Es un procedimiento legal que puede ser llevado a cabo mediante diferentes vías dependiendo de la jurisdicción, como por ejemplo, a través de los tribunales, por mutuo acuerdo (divorcio de común acuerdo) o incluso en algunos lugares por medio de escritura pública ante notario.
El proceso de divorcio establece condiciones y términos específicos sobre la disolución del matrimonio, que pueden incluir acuerdos sobre la custodia de los hijos, la división de bienes, la pensión alimenticia, entre otros aspectos. Una vez finalizado el proceso de divorcio, los cónyuges recuperan su estado civil de solteros, quedando disuelto legalmente el matrimonio.
¿Cuál es la normativa aplicable?
- De la normativa aplicable del Código Civil español, véase sus artículos 81 y siguientes.
- De la posibilidad de formalizar el divorcio ante Notario, véase el artículo 54 de la Ley del Notariado.
- De la inscripción al Registro Civil, véase la Ley del Registro Civil así como su Reglamento de desarrollo.