Mediación ante notario
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La creciente necesidad de descongestionar los sistemas judiciales y encontrar métodos más eficientes para la resolución de disputas ha generado un impulso hacia el desarrollo de vías alternativas. Entre estas, la mediación y el arbitraje destacan como opciones subutilizadas en España. Los notarios, en calidad de funcionarios públicos y expertos legales, están capacitados para brindar asesoramiento sobre estas alternativas y, en algunos casos, incluso pueden desempeñar roles activos como árbitros o mediadores. Su intervención puede facilitar la resolución de conflictos entre partes sin necesidad de recurrir a un proceso judicial tradicional.
La mediación es un proceso extrajudicial destinado a resolver conflictos de manera privada y pacífica, guiado por un mediador que facilita la comunicación entre las partes. A diferencia de un juez, el mediador no tiene autoridad para imponer decisiones, pero su objetivo es ayudar a las partes a alcanzar un acuerdo satisfactorio sin recurrir a los tribunales, todo ello bajo estricta confidencialidad legal.
– Amplitud: Aplicable a una amplia gama de disputas entre individuos y empresas, ofreciendo la posibilidad de llegar a un consenso.
– Eficacia: Los mediadores competentes logran resolver más del 70% de los casos mediante acuerdos mutuos.
– Rapidez: Reduce drásticamente los plazos, pasando de una media de ocho años en procedimientos judiciales a solo unas semanas.
– Economía: Minimiza los costos asociados al proceso legal tradicional.
– Flexibilidad: Permite encontrar soluciones creativas y amistosas, adaptadas a las necesidades y circunstancias de las partes involucradas.
Inicio de la Mediación:
Dado que la mediación es un proceso voluntario, ambas partes deben estar de acuerdo en optar por esta vía para que el proceso comience. Aunque también puede iniciarse unilateralmente, en este caso, una de las partes debe invitar formalmente a la otra a participar en el proceso, ya sea a través de un centro de mediación o de un notario mediador.
Designación del Mediador:
Es fundamental que el notario encargado de la mediación esté debidamente capacitado para ejercer esta función, lo que requiere una formación específica que pueda ser verificada. El mediador puede ser seleccionado por las partes de común acuerdo o designado por el centro de mediación elegido si estas no ejercen su derecho de elección.
1. Sesión informativa y Fundamentos de la Mediación
Durante la primera etapa, denominada sesión informativa, el mediador proporcionará a las partes una visión general del proceso de mediación, incluyendo sus características, organización, y las posibles implicaciones legales de los acuerdos alcanzados. Además, se les presentará un convenio de confidencialidad para su firma. El notario mediador explicará los principios fundamentales de la mediación, destacando su carácter voluntario, la imparcialidad y neutralidad del mediador, la confidencialidad de las sesiones y la flexibilidad para adaptarse a las necesidades de las partes.
2. Desarrollo del Proceso de Mediación
El proceso de mediación varía según las circunstancias de cada caso, pero generalmente sigue un modelo que incluye las siguientes fases:
a. Sesión Constitutiva y Recopilación de Información: El mediador convoca a las partes para iniciar el diálogo y fomentar una comprensión compartida del conflicto.
b. Identificación de Temas en Disputa: El notario mediador identifica los temas e intereses en conflicto y trabaja con las partes para buscar soluciones mutuamente beneficiosas.
c. Sesión de Caucus: Se lleva a cabo una sesión individual con cada parte para abordar temas subyacentes y mejorar el proceso de negociación.
d. Sesiones de Negociación: El mediador facilita sesiones de negociación donde se exploran alternativas de consenso para resolver los puntos de divergencia.
Objetivos de las Sesiones: Estos incluyen definir intereses, identificar puntos en común, generar ideas, aportar soluciones y plantear acuerdos.
3. Acuerdo de Mediación
Si las partes llegan a un acuerdo, el mediador redactará un acta final reflejando los acuerdos alcanzados, que deberá ser firmada por todas las partes y el mediador. Luego, el acuerdo se trasladará a un documento formal, el Acuerdo de Mediación, que también será firmado por todas las partes o sus representantes.
Consideraciones Finales y Sin Acuerdo
El mediador informa a las partes sobre el carácter vinculante del acuerdo y la posibilidad de elevarlo a escritura pública. El proceso puede finalizar sin acuerdo si alguna parte lo solicita, si se agota el tiempo acordado o si el mediador considera que las posiciones son irreconciliables. En tal caso, se redactará un acta final que será firmada por ambas partes.
Costos y Aplicaciones de la Mediación Notarial
Los costos de la mediación se calculan según las horas dedicadas al proceso, que suelen dividirse equitativamente entre las partes. La mediación puede aplicarse en una variedad de casos civiles, mercantiles y familiares, ofreciendo una alternativa eficaz y económica al procedimiento judicial.
El Papel del Notario como Mediador
Los notarios, como mediadores, aprovechan su formación legal, independencia e imparcialidad para facilitar un diálogo constructivo entre las partes y buscar soluciones aceptables para todos los involucrados. En muchos casos, si la mediación no tiene éxito, se puede considerar el arbitraje como una alternativa para resolver la disputa.
